Los estudiantes como motor del cambio

La producción, circulación y distribución del conocimiento depende cada vez más de construcciones que resultan originales por su polifonía, y que surgen del trabajo en colaboración, colectivo y colegiado enriquecido a través de redes y comunidades de práctica. 

Cuando iniciamos Eutopía nos propusimos construir un modelo para reinventar nuestra manera de hacer escuela. Esa construcción debía ser producto de una reflexión colectiva, en la que participen todos los actores de la comunidad educativa. Para ello dialogamos con especialistas y pedagogos, quienes nos fueron guiando para que de nuestra práctica escolar emerjan categorías teóricas para la construcción de una pedagogía propia, pero flexible y transformadora.

Durante los primeros tres años interpelamos, rediseñamos, transformamos y revisitamos los modos de abordar nuestra tarea como educadores. En cada proyecto, en cada prototipo, pusimos en práctica una serie de categorías para transformar diferentes dimensiones de la gramática escolar: tiempo, espacio, evaluación, vínculos, estrategias de enseñanza y curriculum. 

El objeto de estas transformaciones sigue siendo promover experiencias escolares que brinden a los estudiantes la oportunidad de desarrollar habilidades y aprendizajes necesarios para la vida, en el marco de una cultura colaborativa, abierta y digital. 

Sobre el final de la primera cohorte, el equipo de la cátedra de Educación y Tecnologías de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires (UBA) integrado por Mariana Maggio, Carina Lion, Veronica Perosi y Tzipora Meta, realizó un estudio investigativo sobre Eutopía. El mismo tuvo como propósito favorecer la reflexión crítica sobre el sentido de prácticas innovadoras de gestión y de enseñanza, y analizar las experiencias de transformación que se dieron en las escuelas participantes de Eutopía sobre los diferentes actores educativos y en la comunidad en general. 

Para ello realizó un trabajo de campo en ocho escuelas: entrevistó a catorce directivos, veintidós docentes y treinta estudiantes. La participación de los directivos fue un insumo fundamental para el análisis institucional. Los datos obtenidos en las entrevistas a los docentes constituyeron la matriz para el análisis didáctico. Los datos obtenidos en las entrevistas a estudiantes permitieron analizar su visión acerca de las experiencias vividas.

Las investigadoras encontraron que las escuelas se percibían, en parte, como una institución tradicional, rígida y fragmentada, pero compartían el deseo de cambio y su preocupación por los estudiantes. De su estudio se desprende que, si bien Eutopía es un modelo común, toma una identidad original en cada escuela. Cada institución se apropia del proyecto de manera única, creando un dispositivo original que se identifica con la escuela y sus propósitos, teniendo en cuenta las necesidades detectadas y las características propias de sus estudiantes. 

Por otra parte, en el equipo de investigación afirmó que con Eutopía se habilita un nuevo lugar para la toma de conciencia del problema educativo y se abre un interrogante que cuestiona las creencias personales propias de la historicidad escolar. Además, se permite derribar mitos en lo que respecta a la transformación de las experiencias educativas. Docentes y directivos comienzan a repensar algunas premisas establecidas y concebir el cambio como inevitable en las prácticas. 

Otro aspecto destacado en su análisis es que Eutopía ha invitado a instalar la discusión pedagógico-didáctica dentro de las escuelas, mediante espacios de discusión, reflexión y construcción sobre la práctica. La idea que nos mueve es que no todo es como está dado y que es posible realizar transformaciones en nuestras instituciones. 

Por último, las académicas resaltan que los estudiantes no sólo se han convertido en el motor y en la razón para impulsar el cambio en las escuelas, sino que son protagonistas de este proceso.

Las conclusiones de este estudio nos invitan a renovar nuestro compromiso con el proyecto. Queremos seguir dejando una marca de innovación en las escuelas participantes que seguramente tendrá repercusiones significativas a lo largo del tiempo, más allá de las perspectivas de desarrollo que logren diseñarse e implementarse.  No sólo no estamos solos, sino que tampoco hay vuelta atrás. 

¿Qué te pareció este contenido?

Promedio de puntuación 5 / 5. Recuento de votos: 2

Sin calificaciones

Compartilo
Publicaciones relacionadas

Mirá las últimas publicaciones